23/11/17

Sin título (Remastered)

De vuelta a ver papelitos viejos, me encontré con este esbozo. Una piececita de rompecabezas que no cabe en ningún lado, pero que no quiero que se pierda, como seguramente perdí ese nombre.
Pero el amor, esa palabra
Julio Cortázar

¿Qué nombre buscás? ¿Cuáles son sus verdaderas letras? ¿Qué idioma es el tuyo? Si la expresión en (la) lengua no basta, ¿cómo he de nombrarte? ¿Con cuál de todos los apelativos posibles advertirías que mi mano busca la tuya? Si me quedo sin palabras, no sabré cómo llamarte. ¿Con qué vocablo he de anunciar(me) tu presencia? ¿Con qué combinación de sonidos clamaré cuando estés ausente? Entonces sólo quedaría «//silencio//». De ese país soy un completo extranjero. Si únicamente me quedo con eso, seré invisible. No asistirías a mi llamado. Los ojos que te anhelan se mimetizarían con el ambiente, volviéndose otro par de globos oculares, espectadores ciegos. Es más. La lejanía por tu nombre se haría infinita; serías inalcanzable, ina(l)udible. Te destierras de mi voz. Me envías al exilio silente de ver tu imagen destilada sobre el horizonte, sin poder hablarte, ni con la boca ni con la mirada.